En una final cargada de emoción y tensión, el seleccionado de la Liga Albardón-Angaco se alzó con el título de la Copa País tras vencer por 1-0 a la Liga Sanmartiniana. El encuentro, disputado en un estadio repleto, fue un reflejo del esfuerzo y la garra de ambos equipos, que lucharon hasta el último minuto por la gloria.
Desde el inicio, el partido se presentó como un verdadero duelo de estrategias. La Liga Sanmartiniana, con un juego más ofensivo, buscó constantemente el arco rival, mientras que Albardón-Angaco, con una defensa sólida y bien parada, supo contener los embates y apostar por los contragolpes.
El único gol del encuentro llegó en el segundo tiempo, gracias a una jugada individual que desequilibró la balanza. Tras un error en la defensa sanmartiniana, el delantero de Albardón-Angaco no dudó en sacar un potente remate que se coló en el ángulo, dejando sin chances al arquero. El gol desató la euforia en la hinchada y le dio una inyección de confianza al equipo.
Pese a los intentos de la Liga Sanmartiniana por igualar el marcador en los minutos finales, la defensa de Albardón-Angaco se mantuvo firme y ordenada, impidiendo cualquier intento de reacción. El pitido final del árbitro desató la locura en el equipo campeón, que celebró con euforia una victoria merecida y un título que quedará en la historia.
La Copa País se quedó en manos de la Liga Albardón-Angaco, que demostró ser el equipo más regular y competitivo del torneo. Con un juego inteligente y un espíritu de lucha inquebrantable, lograron superar a un gran rival y coronarse como los campeones.